Tener claros los objetivos es sin duda una excelente práctica, pero pierde valor si los mismos no se cumplen a lo largo del año.
Empezamos el año y las conversaciones con muchos ejecutivos giran alrededor de la tranquilidad de saber que ya los objetivos del año han sido desplegados, aun sabiendo que tienen desafíos por delante. De cierta manera hasta se siente cierta tranquilidad, ya que parece que la tarea está terminada al plantear y comunicar los objetivos. Tener claros los objetivos es sin duda una excelente práctica, pero pierde valor si los mismos no se cumplen a lo largo del año y para ello el seguimiento de los KPIs es fundamental. Lo mismo pasa con nuestra carrera: debemos plantearnos objetivos claros y medibles y debemos asegurarnos de revisar si hemos cumplido los mismos y registrar nuestros logros.
En el último estudio de empleabilidad de LHH-DBM solo el 48% de los encuestados afirmó revisar sus metas por lo menos una vez durante el año, es decir, van como un barco a la deriva trabajando día a día sin saber si están cumpliendo lo que se espera de ellos. Una herramienta muy poderosa para poder saber cómo vamos en nuestro día a día es registrar el avance de nuestros logros. Lamentablemente se tiene la idea equivocada de que solo debemos hacer ese registro una vez que se cumplen los objetivos, sobre todo en un CV, si se está buscando un empleo, pero no hay nada más equivocado que eso. Tener la disciplina de registrar nuestros avances es importante para nuestra empleabilidad. Les doy cinco razones de por qué registrar los logros:
1. Nos permite saber si tenemos logros o no. Parece obvio pero vemos personas que descubren al tratar de hacer una lista que son pocos los logros obtenidos y que de haberse dado cuenta antes se hubieran esforzado más por mejores resultados.
2. Podemos identificar rápidamente en qué somos buenos y en qué no. Si vemos un patrón en los logros obtenidos, por ejemplo, en eficiencias, o temas de clima laboral, sabremos más de nuestras fortalezas y en qué debemos esforzarnos más.
3. Tendremos una herramienta sólida para vendernos mejor. En el estudio que mencioné, solo el 45% de los encuestados afirma que sus jefes conocen al detalle sus logros. Recordemos que nuestro jefe es nuestro mejor cliente.
4. Trabajar en obtener logros. Si registramos nuestros logros y nos damos cuenta que han pasado semanas y no tenemos logros significativos, es una señal que algo no está bien. Debemos tomar conciencia de que se nos contrata para agregar valor.
5. Nos daremos cuenta si nuestros logros están alineados con los objetivos. Al registrar nuestros logros debemos compararlos con lo que se espera de nosotros. Podemos tener logros y estar orgullosos de ellos, pero, ¿están alineados con el negocio?
Tener objetivos claros es realmente importante, lograrlos lo es más aún. Pero tener disciplina de revisar el cumplimiento de los mismos y registrar nuestros logros nos ayudará a elevar nuestra empleabilidad y manejar mejor nuestra carrera.