Línea de carrera: Tras alcanzar la gerencia general, ¿qué sigue?

Línea de carrera: Tras alcanzar la gerencia general, ¿qué sigue? (ver video)

Fuente: SemanaEconomica.com /  17-07-14

Empresas más grandes, nuevos sectores y la contribución personal con la sociedad son algunos nuevos retos por asumir. «Un ejecutivo nunca termina de crecer», indica Inés Temple, presidente ejecutivo de Lee Hecht Harrison – DBM Perú.

“Cuando un ejecutivo alcanza su meta de ser gerente general empiezan los retos divertidos en la carrera de una persona”, señala Inés Temple, presidente ejecutivo de Lee Hecht Harrison – DBM Perú. Temple indica que hay una serie de retos que permitirán a un gerente general continuar creciendo de manera constante y estos empiezan desde el momento en que se toma el cargo.

Al recién asumir las funciones de la gerencia general de una empresa la ejecutiva recomienda tomarse un tiempo para pensar en lo que se quiere lograr. “Debe definir, desde el comienzo, cuál va a ser su legado. La posición de gerente general va a durar un tiempo determinado y es clave que el gerente sepa qué es lo que va a querer dejar”, señala Temple.

LOS RETOS

Una vez cómodo en el puesto y con las responsabilidades bajo control, “la siguiente mirada –señala Temple– es a su carrera y a su contribución personal con la sociedad. Ningún ejecutivo puede pretender hacer negocios en un ambiente que no lo esté. Por lo tanto, hay que participar ejerciendo roles de liderazgo en gremios, sociedades civiles y sin fines de lucro para demostrar todo lo que este gerente general puede hacer, no sólo por su empresa, sino por la sociedad también”.

Temple añade que otros retos pueden darse en la forma de empresas más grandes, que pertenecen a nuevos sectores o con planes de expansión. “El crecimiento de un gerente general también está en tener más regiones o crecer a nuevos países. El reto de ingresar a nuevos mercados afuera, consolidar las operaciones, generar operaciones de servicios compartidos para mantener la cultura y la organización bien manejada desde la base, son retos enormes que convocan a muchos gerentes generales”, señala la ejecutiva.

SALIDA ORDENADA

Si es que un gerente general, por la razón que fuera, decide que quiere dejar su cargo, Temple hace hincapié en que lo más importante es que la salida del ejecutivo sea lo más ordenada posible. Eso empieza con comunicación adecuada. “Lo fundamental es tener una conversación muy clara y honesta con el directorio y accionistas sobre sus plazos“, indica Temple.

La ejecutiva enfatiza el punto del orden pues ayuda a mantener a los clientes comprometidos y facilita la transición del sucesor al cargo. Para coadyuvar a ello, Temple recomienda que se fije el plazo dentro del cual se piensa dejar la empresa –seis meses e, idealmente, un año es lo que sugiere la ejecutiva–. Asimismo, recomienda establecer algunos compromisos de metas y resultados para ese periodo.

Por último, Temple señala que es importante que un gerente general tenga a su sucesor escogido y desarrollado. Un gerente general responsable tiene que tener siempre a una persona lista para asumir su posición en caso sea necesario. “La reputación y la marca personal de un gerente general –afirma Temple– están relacionadas no sólo a los resultados de la organización cuando está, sino cómo dejó a la organización”.