Publicado el 01/04/2017 en Revista Boulevard
Inés Temple es Presidente de LHH – DBM Perú y LHH Chile, empresas consultoras líderes en outplacement y movilidad del talento, así como Presidente del Directorio de CARE Perú, organización sin fines de lucro que apoya a las comunidades pobres para erradicar la pobreza. Es autora también del libro Usted S. A., que acaba de salir en una nueva edición.
Líder
El año pasado, Inés fue reconocida entre los 13 top líderes empresariales del país con mejor reputación por el estudio de Merco y el Diario Gestión, lista en la que ha estado cada año entre los top 60 desde el 2012. Ha sido también reconocida como el referente nº 1 del Perú por presencia en internet el 2016 (con 20/20 de nota) y como la CEO con mejor presencia en internet en el país en 2015.
¿Cuáles son las características que debe tener un líder actual?
Líder es quien decide hacerse cargo de una situación, de un reto, un problema o de un grupo de gente y toma al toro por las astas para salir adelante. Por tanto, los líderes no son los que se victimizan o reclaman o culpan, sino son los que actúan, aprenden, resuelven. Se miden a sí mismos por resultados, sin un tema de arrogancia ni ego, más bien van a lo concreto. Este es un típico ejemplo que siempre uso: estás en medio del desierto y tienes que liderar a tu familia, puedes hacerlo de varias maneras, pero probablemente la mejor es animarlos diciéndoles ‘ya estamos llegando; mira, después de estas dunas, hay un oasis’, versus estar en la arena quejándonos por el sol. Movilizar a la gente hacia un lado es fundamental. Otro tema es el respeto y la toma de decisiones, porque tienes que asumir riesgos y jugártela. Así como tienes que saber adónde vas, porque si no llevas a la gente a ningún lado y sigues dando vueltas. Otro punto central es que se preocupan por la gente que cuidan, hay un interés genuino por conocerla, desarrollarla, animarla. Lo mejor que tienen los líderes es sacar lo mejor de cada persona. Otra cosa importante es que los líderes usan su carisma, porque en el fondo el carisma es mostrar nuestra calidez. Lo más importante para funcionar una relación con cualquier otro ser humano es la confianza. Para liderar, la gente tiene que confiar en ti. Pero ¿cuál es el camino más directo a la confianza? Obviamente la capacidad es importante, pero capacidad sin calidez se confunde muchas veces con arrogancia o soberbia. La efectividad y capacidad con calidez hace que la gente confíe, porque el cálido generalmente se percibe como seguro. Y lo más importante es el liderazgo en uno mismo, que es el más difícil, porque hay que mirarse para saber cómo me mejoro, cómo aprendo, cómo sigo creciendo, cómo me transformo.
En un mercado donde las empresas tienen que replantearse y adaptarse constantemente, ¿cuál es el papel del líder?
Creo más que nunca que si uno tiene la responsabilidad de liderar personas, uno tiene que estar adelante. Y adelante es seguir aprendiendo. Hoy ese gran aprendizaje viene por el lado de tecnología. Lo que veo mucho es personas paralizadas o asustadas frente a la tecnología. Se están cerrando a un mundo que viene a una velocidad impresionante y está transformando activamente la manera cómo todos trabajamos. Y si uno no se prepara, simplemente se va a quedar afuera por completo. Y yendo nuevamente al tema de liderazgo, hoy tú no puedes ser líder de nada si no ayudas a las personas con las que trabajas a evolucionar.
¿Cómo fomentar la convergencia de ideas entre personas de un equipo de trabajo?
Todo pasa por un tema de confianza y un establecimiento de metas comunes, saber hacia dónde vamos. Y todo pasa por entender que cada quien va a querer llegar a esa meta por alguna razón diferente. Para eso uno tiene que entender cada una de las razones personales de cada miembro del equipo para lograr cada tarea en particular. Y eso requiere prestar atención a la gente. Muchas veces en los equipos le ponemos atención a la tarea y no a la gente, y al final tienes equipos disfuncionales, que están ahí porque no les queda otra, pero no porque estén apasionados con el logro común.
On line
Inés tiene una buena presencia en redes. En su fan page de Facebook la siguen más de 75 mil personas, donde cada post que sube es compartido rápidamente cientos de veces con una serie de buenos comentarios. En Twitter tiene 25 mil seguidores más y en su canal de YouTube cuenta con 5500 suscriptores.
¿Cuál es la importancia de tener una buena imagen en redes sociales?
Imagen solo es algo que pasa de la piel para afuera, la imagen no existe, es frágil, vana, falsa, a menos que represente una realidad. Entonces uno no puede trabajar en función de crearse imágenes, sino en función de crear realidades de uno mismo. Una realidad on line responde de un deseo de uno de proyectar su marca personal. Para tener una buena ‘presencia’, más que hablar de imagen on line, tienes que aportar contenido. Hoy en día uno es tan valioso como el contenido que comparte. Uno tiene que establecer primero qué quiero yo en mi vida y en mi carrera, a qué quiero llegar en ambos campos. Y en función de eso, en cómo quiero ser conocido. Pero principalmente es porque quiero tener un aporte de valor, porque sin un aporte de valor todo se cae y es falso. Hay que estar en redes, pero eso significa tomar conciencia, por ejemplo, de que Facebook no es un lugar para psicoanálisis colectivo. Facebook es una vitrina pública sobre nosotros, nuestras ideas y sentimientos. Por tanto, como profesionales que queremos tener una imagen coherente en el mercado laboral, tenemos que tener claro que nuestro Facebook tiene que ser muy profesional. Me dirán ‘no, mi Facebook es personal’. No, no existe el Facebook personal ni el privado, todo es público, pues cualquiera puede entrar al Facebook privado de muchas maneras. No quiere decir que no puedas compartir tus fotos personales, pero fotos apropiadas.
¿Qué responsabilidad sientes al haber sido considerada como el referente # 1 de internet en el país?
Es la tercera vez que sale (2015, 2016 y 2017) y a mí me asusta. O sea, un susto positivo, porque es una gran responsabilidad. Porque digo ‘ay, caray, las cosas que escribo la gente las lee’. Y eso significa que no solo tengo que hacer bien mi trabajo cuando escribo y comunico, sino que es una responsabilidad bien grande de mantenerme a mí siempre viviendo en la integridad que proclamo y haciendo las cosas que hay que hacer. Para mí el esfuerzo de coherencia es grande, no porque sea tan difícil porque trato de vivir acorde a los límites que considero apropiado, sino porque te das cuenta que uno es mucho más vulnerable a los errores.
¿Y cómo te quitas ese susto?
Pensando que en algo se puede ayudar y colaborar. Me gusta pensar que parte de lo que hago tanto, que es leer, viajar, ir a congresos, eventos, para refrescarme y traer ideas y poder compartir con las personas surta algún efecto. Yo busco dos cosas cuando hago algún contenido, inspirar buena vibra y cosas positivas y movilizar, ayudar a que la gente tome acción. Porque la verdad es que requiere más esfuerzo. Es mirar ese otro lado, yo creo que todo tiene una parte buena. Mi esfuerzo siempre está en mirar el lado bueno.
Libro
Usted S. A. ya está nuevamente en librerías en una nueva reimpresión. La primera edición salió en 2010 y, en los pocos años, ha tenido un largo recorrido. Es un boom editorial en Perú y Latinoamérica, tanto que es ya un clásico de la empleabilidad y la marca personal.
¿Vas por la edición nº 15?
Hemos vendido más de cien mil legales en físico (en Perú y Latinoamérica), sin contar todo lo vendido en digital y los ‘piratas’. Fue dos años consecutivos éxito en ventas (2012 y 2013), el 2014 fue nº 1 entre los libros de negocios, el 2015 se siguió vendiendo rebien. Hoy es libro de texto en varias universidades (en EE. UU. se dicta en una universidad de Arkansas). Es que es un libro que busca ayudarnos a cambiar el paradigma sobre la realidad del mundo del trabajo. Qué hacer para tener mejores posibilidades de éxito en ese mundo que cambia todos los días y que requiere de una transformación personal.
Care
Inés preside la Junta de Directorio de Care Perú desde hace cuatro años. Care International fue fundada en 1945 cuando 22 organizaciones estadounidenses formaron una cooperativa para hacer llegar rápidamente ‘kits salvadores’ (conocidos como ‘Care kits’) a los sobrevivientes de la Segunda Guerra Mundial. Los primeros 20 000 kits de alimentos donados llegaron al puerto bombardeado de Le Havre (Francia) el 11 de mayo de 1946 para destinar hacia las personas más necesitadas.
¿Desde cuándo está Care en el país? ¿Qué proyectos realiza?
Care llegó al Perú después del terremoto del 70 para ayudar a los damnificados, empezaron en Yungay. Y en adelante trabaja en épocas de no emergencia tratando con poblaciones que están en la pobreza con un enfoque muy importante en temas de género, educación, salud, agua y saneamiento. Hoy tenemos un proyecto bandera que se llama “Niñas con oportunidades”, donde buscamos que de las 700 mil niñas en situación de pobreza, que están en riesgo de no acabar el colegio, puedan hacerlo. En la Amazonía, 1 de cada 10 niñas acaba el colegio a tiempo. En la zona rural andina, 3 de cada 10 lo hace. En el Perú hay 3 millones de personas que viven en comunidades de menos de 200 personas, donde por lo tanto no hay Estado. Esa es la realidad de nuestro país. Y lo que está buscando Care en los próximos cinco años es salvar a 100 mil niñas de quedar abandonadas en la miseria y sin educación. Porque una niña sin educación no solamente pierde toda oportunidad en su vida, sino que perpetúa el círculo de la pobreza: que hereda de su madre y se lo pasa a sus hijos. Estamos ahorita en el programa piloto, y lo que buscamos es que cuando veamos que el modelo ya funcione, hacer que esto se convierta en política pública en dos años.
Y en estas últimas eventualidades de la naturaleza…
Ahora Care, con la emergencia que estamos viviendo, está avocada trabajando ya en el norte, tratando de llevar 8 mil paquetes de ayuda de subsistencia básica a las familias afectadas, y para eso necesitamos que la comunidad nos ayude (observar al final de la nota). Mucha gente en el Perú está ayudando de manera impresionante. Creo que hemos descubierto una solidaridad que sabíamos que teníamos pero que no sabíamos que era tan grande.