Administración de carrera: ¿Trabajo o pasión? - LHH DBM

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Administración de carrera: ¿Trabajo o pasión?

¿Trabajo o pasión? (ver artículo)

Fuente: Revista Mujeres Batalla, Sección Lado B, 28-08-13

«Me costó entender esto de VIVIR PENSANDO en el TRABAJO sin ser TRABAJÓLICO»

Los emprendedores son una clase de personas diferentes. Muchos los han estudiado, definido, catalogado. En nuestro país todos los admiran: son los héroes modernos de la innovación, los creadores de riqueza y empleo. Yo vivo con uno (y espero poder seguir haciéndolo por el resto de mi vida).

M es un empresario nato, aunque trabajó exitosamente en grandes empresas durante los primeros diez años de su carrera. Ha tenido varias empresas, algunas las compró, desarrolló y vendió; otras las hizo públicas llevándolas a la bolsa de valores; también están las que empezó de cero, desafiando la opinión o el sentido común de muchos. Con algunas hizo mucho dinero, en otras perdió mucho también.

Es interesante la pasión que les pone: trabaja en ellas siete días a la semana, recibe y hace llamadas de negocios casi a cualquier hora y puede estar al teléfono por horas cuando se trata de algo importante. Alejarse de sus empresas cuando estamos de vacaciones le cuesta, aunque lo hace por disciplina creo, pues sabe que se debe un sano balance de vida.

Pero no vayan a creer que M es un trabajólico. ¡Es un empresario enamorado de sus empresas! Disfruta pensando en ellas, haciendo planes, proyectándolas en el futuro. A veces también las sufre, como cuando los proyectos se demoran, los proveedores no cumplen o algo falla. Así como yo nunca saco a mis hijos de mi cabeza -esté donde esté-, él nunca deja de pensar en ellas.

Esa es nuestra vida ahora: combinar permanentemente el trabajo y lo personal en los mismos espacios (hacerlo juntos lo vuelve más divertido). Confieso que al comienzo me costó entender esto de vivir pensando en el trabajo sin ser trabajólico, de estar dedicado en cuerpo y alma a las empresas sin descuidar para nada a la familia, la salud, la vida espiritual, la lectura, los amigos y, sobre todo, a la pareja.

Quizá por eso M adora esta cita de James A. Michener: «El maestro en el arte de vivir hace poca distinción entre su trabajo y su placer, entre su esfuerzo y su ocio, entre su mente y su cuerpo, entre su información y su recreación, entre su amor y su religión. Él apenas los diferencia. Simplemente persigue su visión de excelencia en todo lo que hace, dejando a los demás decidir si está trabajando o jugando. Para él siempre estará haciendo ambas cosas al mismo tiempo».

Parecen dos mundos diferentes -trabajo y pasión-, pero he aprendido que para empresarios como M no es así: sus empresas son su vida.

Por eso quizá me dio tanto gusto conocer esta nueva faceta de Antonio Orjeda, quien ha hecho de esta revista, su vida, su pasión, su misión personal. Es su empresa y hoy él es el empresario detrás de su éxito comercial y editorial. Me da un gusto inmenso que Mujeres Batalla haya cumplido un año y que su emprendedor hoy viva y respire como tal. ¡Bravo Antonio! Por ti, por todos nosotros y por el Perú.